¿Remodelar para aumentar el valor de venta?
Si estás pensando vender tu casa o departamento, seguramente estarás pensando en cuál es la mejor manera de obtener el mejor trato por tu propiedad. Esto, en la mayoría de los casos, no es difícil. Únicamente es cuestión de ser minucioso y poner especial atención a los detalles (sobre todo estéticos), para mejor la presentación y hacer que quien se interese pague lo justo y un poco más por tu patrimonio.
Como lo comentamos, el tema estético en muchos casos es el que más impacta, pues es la primera impresión, pero también hay ciertos detalles de funcionamiento e instalaciones que no debemos dejar pasar por alto, pues este tipo de detalles también puede ser fundamental para lograr ese trato tan anhelado.
Ahora bien, entrando en materia, vamos a analizar algunos pasos y aspectos que tenemos que seguir y analizar, para hacer un balance del inmueble, de todo lo que necesita, para poder mejorarlo sin salirnos del presupuesto.
Analiza tu presupuesto
En primera instancia, lo fundamental es tener pleno conocimiento de cuál es el presupuesto con el que contamos y cuanto podemos invertir. Esto es importante porque en muchos casos no vamos a poder ocuparnos de reparar todo y entonces tendremos que hacer un balance de cuáles son los detalles que aportarán mayor valor al inmueble y cuales podemos dejar pasar, sin que representen un factor en contra al momento de la negociación.
Hay que tener en cuenta que, si los trabajos a realizar son mayores, es decir que se trate de una ampliación o remodelación mayor, lo recomendable es siempre ponerse en contacto con un contratista (ingeniero o arquitecto), pues muchas veces cometemos el error de pensar que un maestro albañil nos va a dar las soluciones más prácticas al mejor costo, pero esto puede no ser siempre cierto, ya que esto puede resultar en un sobre costo de hasta el 30% en gastos de mano de obra y materiales, así como un incremento en el tiempo y calidad de la ejecución, por falta de supervisión.
El proyecto
Una vez que revisamos nuestras finanzas y fijamos un presupuesto, es momento hacer el presupuesto de nuestra remodelación. Lo ideal es que te asesores de un contratista para hacer el levantamiento, identificar los detalles y hacer un presupuesto preciso de lo que se tiene que hacer por partidas, para poder definir cuál es la ruta de acción ideal que debemos tomar para poner en marcha la remodelación.
Esto es importante, pues en muchos casos el tema del tiempo, en este tipo de trabajo, es un factor que puede incrementar costos por mano de obra y es por eso que vale la pena contratar un profesional que programe y supervise a detalle los trabajos para que se concreten en tiempo y forma.
A continuación, te enlistamos algunos de los conceptos a los que debes poner atención, que te podrán servir para mejorar tu inmueble de manera rápida y práctica:
- Humedades: en muchos casos es común encontrar estas manchas negras que se producen por humedad, que llegan a tirar la pintura y, en algunos casos el aplanado. Este tipo de humedades se presentan casi siempre por alguna tubería de agua o drenaje con fugas, y lo ideal es contratar un fontanero que descubra la zona donde pasan dichas tuberías, para reparar la fuga y posteriormente poner el aplanado, para dejarlo listo para pintarse. En la mayoría de los casos vale la pena hacerlo de esta manera, pues si no se elimina la fuja de forma permanente, la humedad va a surgir en cualquier momento y tirar la pintura nuevamente.
- Pintura: La pintura es uno de los elementos más fundamentales para dar buena presentación a la casa. Una vez que se han eliminado las humedades, vale la pena valorar que cuartos o habitaciones ameritan repintar o un cambio de color y cuales pueden quedar con solo lavar las paredes.
También es importante que te asesores de un especialista en diseño de interiores o en su defecto buscar información relacionada a los colores que utilizas en determinados espacios, ya que un color adecuado, según el espacio o tipo de arquitectura o fachada, puede hacer una gran diferencia e influir en las decisiones de tus prospectos de cliente.
Recuerda que siempre es importante cuidar los costos de tu remodelación, para sacarle el mayor provecho, por lo que deberás ser muy cuidadoso en elegir la marca y supervisar que quien la aplique lo haga adecuadamente, con el mínimo de desperdicio. - Fisuras y agrietamientos: en muchos casos se pueden presentar agrietamientos en muros y elementos estructurales, debido a los cambios de temperatura o sismos, pero esto no quiere decir que represente una falla estructural en el inmueble, siendo factible y necesario trabajar en ellos, para eliminar malas impresiones de tus clientes a la hora de ver la casa.
Esto lo puedes lograr simplemente retirando el aplanado o yeso y volviendo a cubrir, para posteriormente pintar. - Pisos y azulejos: en muchos casos los pisos y azulejos se pueden romper por golpes o por que la colocación no fue la adecuada. En estos casos, si la marca y modelo del piso ha sido descontinuada, podemos reemplazar los azulejos o piezas de piso que sean necesarios o los menos dañados, para mejorar la presentación de nuestros espacios.
Además de estos conceptos que te mencionamos, es muy probable que surjan muchos otros más que vas a tener que resolver para poder dar el valor que esperas a tu propiedad. No obstante, es importante que lo valores de la mano de un profesional, para saber que está dentro de tus posibilidades y, en caso de no poder cubrir todo, te recomendamos que te acerques a una agencia inmobiliaria, ya que por lo regular esta clase de negocios cuentan con personal capacitados en ventas que podrán ayudarte en la negociación, para lograr un mejor trato.
Esperamos que estos consejos te hayan servido y agradeceríamos te tomes unos segundos para compartir y comentar con tus amigos y familiares en las redes sociales.
